No todo sale como queremos o como nos gustaría.
Después de 13 años en un mismo sitio duele saber que quieren que te vayas, que han estado todo un curso puteandote deseando que llegue el 22 de junio. Como un sólo hecho del que tu ni siquiera eres responsable, manche tantos años de convivencia, que fastidie un fin de curso que llevas esperando desde hace años. Porque creo que no soy la única que soñaba con el círculo en el patio, toda la clase junta, con una canción bonita y llorando como locos; el final delante de todo el colegio, recordando lo BUENO de todos los años; la cena de graduación con los padres viendo las fotos de París...
Ahora realmente me han demostrado la clase de personas que son, lo falsos y rencorosos que pueden llegar a ser. Si algo se sale de lo previsto, o no es lo que ellos quieren, se lía parda. Porque hay que admitir que hemos sido una clase revolucionaria y que ha habido momentos que hemos tocado lo que no suena, pero, ¿acabar así? Es realmente triste. Que la frase después de una canción penosa para la ocasión (Me voy de Julieta Venegas, gracias por la indirecta) no tengan otra cosa que decir 'Ara ajudarem tots a netejar la brossa' cuando estábamos todos juntos sentados en el suelo (en una esquina), es realmente penoso.
¿Y aún así quieren que creamos que nos van a recordar por cosas buenas y que se acordaran de nosotros para bien? Querían darnos una lección y se la hemos acabado dando nosotros a ellos. Porque ahora no solo tienen con contra a los alumnos y a muchos ex-alumnos, también a padres y a gente externa del colegio.
Sólo me consuela pensar que me quedan 3 días como alumna, aunque vaya a estar un mes y medio mas trabajando allí (si es que deciden cogernos definitivamente después del discurso del miércoles...)
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